Marcando un giro decisivo, el sistema de compensación de emisiones vinculado al Impuesto Verde entró en vigencia el 29 de septiembre de 2023, con el Decreto Nº 4 de 2023 del Ministerio del Medio Ambiente. Este cambio, no solo presenta desafíos, sino también oportunidades emocionantes para aquellos líderes empresariales dispuestos a abrazar la sostenibilidad de manera proactiva.
Este revolucionario sistema no solo premia a quienes lideran iniciativas ecológicas, sino que también crea una vía para que las empresas mitiguen su huella de carbono. Proyectos aprobados pueden emitir certificados de reducción de emisiones, permitiendo a los contribuyentes compensar sus emisiones gravadas con el Impuesto Verde.
Para los directorios de empresas, esto plantea un desafío apasionante: garantizar la efectividad y la conformidad de las estrategias de compensación. Los criterios de adicionalidad, medibilidad, permanencia y verificabilidad certificados por auditores externos son esenciales para maximizar este nuevo recurso y evitar posibles riesgos legales.
El elemento de temporalidad agrega una dimensión estratégica. Las solicitudes de compensación deben realizarse hasta el último día hábil de febrero del año siguiente a la generación de emisiones, exigiendo una planificación cuidadosa por parte de las empresas.
De esta forma, los directorios en Chile ya han implementado dentro de su planificación estratégica este enfoque dinámico que destaca la necesidad de inversión constante en tecnologías limpias y prácticas sostenibles. Los directorios deben considerar estos elementos como inversiones cruciales para garantizar la sostenibilidad de manera proactiva.
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